La obra del pintor cubanoamericano Xavier Cortada es una síntesis de sus talentos, intereses e inquietudes. El jóven artista miamense utiliza el arte no sólo como vehículo de expresión personal sino también para educar y crear conciencia sobre problemas sociales. Con ese propósito, Cortada ha viajado a cuatro continentes. Además de pintor, Cortada es abogado e activista comunitario.

Cortada, 34, ha presentado su obra en San Antonio, Palm Beach, San Francisco, en la prestigiosa Longwood Arts Gallery en Nueva York así como en el Capitolio en Washington. En julio de 1997 tuvo una exposición en el Museo de Arte Contemporáneo en la Municipalidad de Cusco en Perú. En noviembre de 1997 Cortada expuso "Compartiendo con Bolivia" en el Museo Tambo Quirquincho de La Paz. En abril de 1998, en la exposicion titulada "CUBABA" en el ArtCenter South Florida en Miami Beach , el artista mostró pinturas con el tema de la identidad cultural. El 8 de enero, 1999, se inaugura"Welcome Medusa" (Bienvenida Medusa), una exposición patrocinada por Niketown en la Galeria Wirtz de South Miami.

Cortada nació en Albany, NY, de padres exiliados cubanos en 1964. Se crió en La Pequeña Habana en Miami. Primero tomó brocha en mano a los siete años de edad bajo la tutela de su padre Carlos Cortada, un respetado pintor cubano. Estos primeros pasos también fueron nutridos por la rica herencia artística de Cuba trasladada al exilio. La sensibilidad vanguardista cubana y la pasión de los jóvenes pintores de la década de los sesenta se hizo presente en su educación artística. La paleta artística de Amelia Peláez, con su uso de colores puros y elementales también es evidente como influencia.

En 1991, recibido de abogado pero con cuestiones artísticas y personales por resolver, Cortada se propuso integrar su carrera legal con su vocación artística. Su obra comenzó una nueva etapa. Retomó temas sociales en sus cuadros y empezó a crear una serie de murales en diferentes partes del mundo. Trabajó en barrios marginales al igual que en sedes diplomáticas. Fue el primer artista extranjero a exponer en Soweto después del fin del régimen de apartheid en Africa del Sur.

Cortada ha promovido sus ideas trabajando al nivel comunitario en su ciudad de Miami y en otros lugares: Ha creado murales comunitarios con pacientes de SIDA, niños ciegos y victimas de cancer, indios norteamericanos y jóvenes pandilleros. Utilizó su arte come agente de cambio social cuando viajó a Sierra Leona, Tanzania, Kenia, la isla de Mauricio, Africa del Sur, España, Colombia, y a otros países. Para el jóven pintor el arte es un idioma universal que se puede usar como vehículo de expresión y comunicación individual o colectiva.